sábado, 28 de marzo de 2020

El hombre que mató a Don Quijote (2018)


El hombre que mató a Don Quijote es una coproducción entre España, Bélgica, Francia, Portugal y Gran Bretaña de arte y ensayo dirigida por Terry Gilliam.


Estamos ante la que consideran la película más maldita de la historia del cine. Desde que se ideó hasta que se estrenó pasaron más de 30 años y sufrió toda clase de percances que han hecho que a su director se le considere un Quijote moderno por la cabezonería que mostró para poder realizarla. 

Todo empezó en 1989, poco después de estrenar la que yo considero un peliculón Las aventuras del Barón Munchausen, Gilliam leyó por primera vez El Quijote y vio algo que le hizo querer hacer una película con ese personaje, pero a su manera. 

Diez años tardó en sacarlo adelante y en 1998 anunció que su siguiente película sería esta. Se contrató a Johnny Dep, actor muy de moda y en el 2000 comenzó el rodaje.

La historia iba sobre un hombre que viaja en el tiempo de tiempos actuales al pasado y es confundido por Quijote con Sancho. 32 millones de presupuesto la convertían en la película más cara rodada en Europa por aquel entonces.



Pero desde el primer día comenzaron los problemas. El actor contratado para hacer de Quijote tuvo que ser hospitalizado. Por la zona de rodaje, Las bardenas reales, pasaban aviones de un cuartel cercano, hubo una tormenta que fastidió el set... Todo ello lo cuentan bastante bien en el documental Perdidos en la mancha.

El rodaje quedó paralizado, los inversores reclamaron el dinero que habían puesto, las aseguradoras pagaron 15 millones y se quedaron con los derechos del guión... Puede que por eso esta película sobre la que os escribo sea tan diferente a la que en un principio tenía pensado, porque yo conocía la sinopsis antigua y estaba emocionado creyendo que sería otro barón de Munchausen... pero no.

Nada se supo de el hasta 2010 en que Gilliam quisó volver a realizarlo, se barajaron muchos nombres pero la cosa quedó en nada. Hasta 2016, año en que por fin se volvió a poner en marcha, con un presupuesto de 17 millones de euros. Poco antes de empezar el rodaje uno de los productores se retiró y poco antes de estrenarse hizo una jugarreta que no sé en qué habrá quedado al final. 



La película ha sido un fracasazo en taquilla, solo ha recaudado 3 millones a nivel mundial.

Esta nueva historia nos presenta a Toby (Adam Driver) un director egocéntrico que está rodando una película sobre El Quijote, personaje con el que realizó su primer proyecto cuando empezaba. Para realizar ese trabajo contrató a lugareños, como  Javier Sánchez (Jonathan Pryce) el zapatero del pueblo a quien hace su Quijote, y a Angélica (Joana Ribeiro) la hija del dueño del bar con la que tontea.



En un descanso del rodaje decide ir a ver el pueblo donde realizó su primer trabajo y ve que han cambiado mucho las cosas y que tienen a Javier como atracción en un extraño lugar. Javier logra escapar y por azares del destino Toby huye con él sucediéndoles lo que debieran ser fascinantes aventuras, pero que para mí no lo son. No son más que sin sentidos que alargan y mucho la historia, 132 minutos dura y le sobran 110.

Llegan a un sitio destartalado en el que se esconden inmigrantes ilegales. Encuentra a Angélica, que resulta ser la chica de compañía de un multimillonario excéntrico ruso (Jordi Mollá), confunde a un rebaño de ovejas con sabios moros... 



Y tras muchas otras sinrazones llega el final, un tanto estúpido. 




Es una pena porque yo me esperaba otra cosa, como ya escribí, una nueva aventura al estilo el barón Munchausen. Pero esto que he visto me ha defraudado y mucho.

No niego que ha habido momentos que me han gustado y que cada vez que sucedían yo, ingenuo de mí, decía: Ahora empezará lo bueno, pero no, es un truñín considerable.

Mucho topicazo con el flamenco, procesiones, Iglesia Católica, la Guardia Civil y... Al igual que en aquella película de Tom Cruise una hoguera en la que queman cosas del año anterior y que lleva en lo alto una imagen de la Virgen María ¡¡¡???



La fotografía es muy buena y hay escenarios que me han encantado, sobre todo este

Los actores no lo hacen mal, en especial los protagonistas: Quijote y Sancho. Driver me ha parecido una sorpresaza. 

El doblaje está bastante bien. 

De la música se encarga Roque Baños y está bastante bien. En un momento me ha parecido escuchar una especie de homenaje a esta pieza




NOTA 3,315015 DE 10

Una pena. Me esperaba algo bastante mejor y me he encontrado una cosa ridícula a veces. 


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