Supongo que para aprovechar el tirón de la saga Bourne a los guionistas de esta película se les ocurrió una «genial idea» y que aprovechando que tenían amigos en nuestro país, España, decidieron que se la produjesemos entre todos, esto lo supongo porque como pone en la página del Ministerio de Cultura que la producción es española y aquí en España las películas se hacen con el dinero de todos. Así que no sé cómo engañaron a Sigourney Weaver y a Bruce Willis y chaaas, rodaron este telefilm.
Comienza la historia con Will (Henry Cavill) llegando a España, Martin (Bruce Willis), su padre, le espera en el aeropuerto y le lleva con el resto de su familia a un yate que tiene en la costa de Alicante. Will se pasa todo el día pegado al móvil porque hay problemas en su empresa.
Al día siguiente dan un paseo por la costa y por culpa de Will la novia de su hermano sufre un leve accidente. El padre se mosquea y tira el móvil al mar y Will decide bajar al pueblo para tomarse una cocacola y, de paso, comprar algo para el golpe que sufre su futura cuñada. Después del paseo llega a la playa y... tachaaan, el barco ha desaparecido. Camina bordeando la costa y lo encuentra pero... tachaaan, está hecho una m... y su familia ha desaparecido.
Will vuelve al pueblo y se lo cuenta a los municipales, no sabe que estos están comprados por los malos y tratan de llevársele, pero él les roba un coche y se escapa. Sufre un accidente y están a punto de pillarle pero... tachaaan, aparece su padre, le salva y le lleva a los Madriles.
Allí Martín se pone en contacto con Carrack (Sigourney Weaver), su superiora, le cuenta lo que ha pasado y ella se compromete a ayudarle...
Y a partir de aquí la historia comienza a llenarse de situaciones tontas, de giros y más giros, de sorpresas telenoveleras, Will conoce a Lucía (Verónica Echegui) que resulta que es su hermana.
Nos enteramos que Martin robó un maletín al Mossad y que estos quieren recuperarlo a como de lugar, Zahir (Roschdy Zem), el jefe de la misión de recuperación, acaba siendo amigo de Will. Por cierto, que según la película esa organización actúa en España con la misma libertad que si estuviese en su país.
Hay varias persecuciones con vehículos a lo largo de la película, pero la más curiosa es la final en la que los coches se persiguen dando vueltas, y más vueltas, a la plaza de toros de Las Ventas.
La película es muy sosa, muy malona. Trata de meter tantas sorpresas que en vez de gustarte acabas bostezando. Es la típica película que echan en Cuatro los sábados por la tarde. Es de agradecer que siendo española no se vean tetillas ni se escuchen muchos tacos, aunque creo que eso es más bien debido a que los guionistas son useños.
Los actores, ni fu ni fa, los famosos lo hacen bien los no tan famosos no tan bien.
El doblaje es bueno. Aunque por momentos parece que Ramón Langa tuviese dentadura postiza y la tuviese mal puesta.
Lucas Vidal ha hecho un buen trabajo en la banda sonora. La composición que esperas para una película de espías, con persecuciones y tal.
Como productor forzoso, en mayor o menor medida, estoy descontento. Aunque al contar con estrellas supongo que habrá recuperado lo invertido.
Los actores, ni fu ni fa, los famosos lo hacen bien los no tan famosos no tan bien.
El doblaje es bueno. Aunque por momentos parece que Ramón Langa tuviese dentadura postiza y la tuviese mal puesta.
Lucas Vidal ha hecho un buen trabajo en la banda sonora. La composición que esperas para una película de espías, con persecuciones y tal.
NOTA 4, 00702719 DE 10
Como productor forzoso, en mayor o menor medida, estoy descontento. Aunque al contar con estrellas supongo que habrá recuperado lo invertido.