Viaje a Agartha es una película japonesa de arte y ensayo dirigida por Makoto Shinkai.
No hay tráiler en español, pero sí el vídeo clip de la canción final.
Me gustan los dibujos animados, lo reconozco, todas sus ramas. Una de ellas, el anime japonés, suele darme bastantes momentos de entretenimiento. Por eso desde que leí las primeras críticas de esta película esperé con ganas el que la trajesen a España para poder verlas, ha tardado dos años y...
Me encontré con un tru... ña... co de los gordos.
Seré breve.
Comienza con Asuna (Violeta Bibiloni), subiendo a un monte coge una radio artesanal de un escondite a la que pone una piedra preciosa y se queda estupefacta escuchando no se qué música junto a una especie de gato-ardilla-picachu. Después la vemos ir a su casa a cenar y al día siguiente ir a la escuela donde escucha que se ha visto un monstruo en no sé qué zona. Y ella, al salir de clase, va para su escondite al que, casualmente, se llega pasando por la zona donde se vio al monstruo.
Se encuentra con el monstruo y con un chaval llamado Shun (David Jenner) que la salva del monstruo. Se establece una extraña relación entre los dos. Shun procede de Agartha. Al día siguiente la chica va al cole y se encuentra con un nuevo profesor, Morisaki (Ángel de Gracia). Y, la verdad, es que es tan rollo que no sé cómo continuar. Shun se muere, aparece su hermano menor llamado Shin.
Luego resulta que el profesor nuevo forma parte de un grupo llamado los arcángeles que tratan de encontrar Agartha. El profesor para devolver a la vida a su esposa y el resto del grupo para que la gente de Agartha les ayude a ser mejores y a avanzar.
Agartha es un lugar en el interior de la Tierra, en el que se vive a la manera medieval y que cada dos por tres es invadida por los terráqueos, así que muy tontos han de ser los que esperen algo de los agarteños. Y si ya antes de entrar en Agartha la película era un rollo, desde que entran lo es más.
Seré breve.
Comienza con Asuna (Violeta Bibiloni), subiendo a un monte coge una radio artesanal de un escondite a la que pone una piedra preciosa y se queda estupefacta escuchando no se qué música junto a una especie de gato-ardilla-picachu. Después la vemos ir a su casa a cenar y al día siguiente ir a la escuela donde escucha que se ha visto un monstruo en no sé qué zona. Y ella, al salir de clase, va para su escondite al que, casualmente, se llega pasando por la zona donde se vio al monstruo.
Se encuentra con el monstruo y con un chaval llamado Shun (David Jenner) que la salva del monstruo. Se establece una extraña relación entre los dos. Shun procede de Agartha. Al día siguiente la chica va al cole y se encuentra con un nuevo profesor, Morisaki (Ángel de Gracia). Y, la verdad, es que es tan rollo que no sé cómo continuar. Shun se muere, aparece su hermano menor llamado Shin.
Luego resulta que el profesor nuevo forma parte de un grupo llamado los arcángeles que tratan de encontrar Agartha. El profesor para devolver a la vida a su esposa y el resto del grupo para que la gente de Agartha les ayude a ser mejores y a avanzar.
Agartha es un lugar en el interior de la Tierra, en el que se vive a la manera medieval y que cada dos por tres es invadida por los terráqueos, así que muy tontos han de ser los que esperen algo de los agarteños. Y si ya antes de entrar en Agartha la película era un rollo, desde que entran lo es más.
Vaya truño. Las situaciones son absurdas, los diálogos lo son más (Asuna camina con una compañera que le pregunta si van juntas a casa, nuestra prota la contesta que no, que se tiene que ir a casa¡!). Vale que la animación es cojonuda, pero qué importa cuando la historia es risible. Mezclan distintas teorías de lo más extrañas. Los monstruos se llaman ¡¡¡Quetzacoatl!!!
El doblaje es regularcillo.
De la música se encarga Tenmon no está mal, pero hay mucha y en muchas ocasiones no pega con lo que está sucediendo.
NOTA 1,3712122608 DE 10
De los peores animes que he visto. Dos horas de cosas absurdas, bien animadas, pero absurdas.