Afterparty es una película española de suspense dirigida por Miguel Larraya.
Curioso es que tenga el título en inglés y también es curioso que teóricamente se haya estrenado en cine y que al mismo tiempo, o puede que antes, se encuentre en varias páginas de descarga, como pasó con esta otra película. O sea, que no la vio ni Dios y debieron pensar que así tendría más público.
Comienza la historia en un bosque, por la noche, una pareja se está haciendo arrumacos cuando de repente aparece un asesino enmascarado y... nos enteramos que lo que estábamos viendo es el capítulo final de una serie titulada «Campamento» que alguien ha subido a la red antes de estrenarse...¡¡¡Qué curioso!!!
Nos enteramos que el protagonista de «Campamento» se llama Carlos (Lucho Fernández), conocido como «Capi» que tiene un gran club de admiradoras y que va a saltar el charco para rodar en Hollywood la continuación de El zorro. Carlos y un amigo van a una fiesta en una casa en el quinto pino.
La fiesta es el despiporre y nuestro protagonista se liga a una chiquilla llamada Carla (Alicia Sanz). Mientras están dale que te pego, ya sabéis, la gente se va de la fiesta y las persianas de la casa se bajan. Al llegar el día Carlos se despide de la chica e intenta irse, pero no puede. Todo está cerrado. Mientras busca una salida encuentra a dos chicas, Lucía (Rocío León) y María (Úrsula Corberó), que han debido pasar la noche juntas. A través del móvil ven como un asesino en la casa, vestido igual que el asesino de la serie, se está cargando a la hermana de María. Al tratar de salvarla encuentran en la casa a Nacho (Juan Blanco).
Sospechan de él aunque lo descartan cuando les cuenta que se quedó dormido durante la fiesta y al despertar se encontró la casa cerrada.
Y, bueno, ya sabréis, comienzan a morir, se produce un giro «Shyamaleño». Carlos se va a los EE.UU. y las admiradoras hablan de él a través de sus webcam.
Tiene sus momentos. No es una maravilla de película. Quizá ganaría un poco si se doblase a los actores porque no saben actuar con la voz, son muy malos. Dura poco más que un capítulo de una serie, así que no llega a aburrir del todo.
El guion lo firman el propio director y Fernando Sancristóbal Zurita.
El guion lo firman el propio director y Fernando Sancristóbal Zurita.
La música la pone Lucas Vidal, nada del otro mundo.
NOTA 5,00001236 DE 10