Gracias a mi hermana, y a mi cuñado, subo una categoría:
He sido nieto, hijo, sobrino, primo, hermano, cuñado (concuñado) y ahora tío.
He sido nieto, hijo, sobrino, primo, hermano, cuñado (concuñado) y ahora tío.
Esta entrada simplemente es una «nadedaz» a modo de agradecimiento.
Poco más puedo decir por el momento.
Tendré un sobrino que será muy guapo y listo y muy bueno y cabroncete... con ellos, conmigo solo bueno. Que hará rabiar a sus padres, como debe de ser, pero que sobre todo les hará más felices, porque supongo que a la hora de echar cuentas las alegrías serán mayores que las penas para un gran porcentaje de los padres.
Es bonito que haya personas que pasen del egoísmo, del vivir para uno mismo, y quieran dar un paso adelante. Sabiendo los problemas que hay, las dificultades que eso conlleva. Una boca más que alimentar es uno o dos o tres fines de semana menos de borrachera que no de fiesta, porque fiesta también se tiene cuando se está con quien se quiere.
Y paro, porque estaba empezando a ponerme en plan sermón y ni soy cura ni tengo palabras para explicarme.
Este par de vídeos son muy interesantes.